lunes, 9 de septiembre de 2013

Bobastro y Omar Ben Hafsun








           En el norte de la provincia de Málaga y cercanas al pueblo de Ardales se encuentran las ruinas de Bobastro ligadas estrechamente a este personaje histórico: Omar Ben Hafsun conocido como "El Libertador". Dejo aquí además de estas fotos bajadas de Internet unas breves pinceladas sobre su biografía.


         Omar "El Libertador"

             En las inmediaciones de Parauta, en el año 850, en la alquería de Torriche, nace este héroe, el celebérrimo Omar-Ben-Hafsun, hijo de Alfonso el Noble. Su abuelo conde de Ronda y gobernador de esas tierras en tiempos del rey D. Rodrigo, era cristiano y guerrero belicoso y de él era sexto nieto (de la sexta generación). Por arabización Omar es el nombre de este héroe pero su nombre cristiano fue el de Samuel.
             Desde niño fue osado, resuelto, indómito y altanero enfrentándose valerosamente a los invasores árabes por los atropellos y desprecios de que eran víctimas los cristianos andaluces.
            Ya joven, fue un mocetón vigoroso, esbelto, de tez mate, ancho pecho, musculoso, gran jinete y diestro en toda clase de armas. Un serrano de hierro, voluntarioso e inquieto y de actitud rebelde que motivó el enojo del walí de Reya con capital en Archidona.
         Organizó a los diecinueve años una partida de bandoleros que fue el terror de la serranía. Cayó en una emboscada y para librarle de la horca su padre abandonó con él sus tierras y se refugiaron en la roca de Bobastro. Mas al poco tiempo prosiguió sus aventuras iniciando una campaña de guerrillas hasta que en una de sus correrías dio muerte al propio hermano del walí. Delatado y vuelto a encarcelar, logra evadirse y alcanza la costa embarcándose para Tánger. Más tarde habla allí con un anciano que sabiendo de sus hazañas le insta a que vuelva y luche contra los Omeya para liberar a sus hermanos oprimidos, augurándole que reinaría en España. Estas palabras estimulan a Omar y en el 880 desembarca en Estepona y apoyado por su tío que reunió unos 40 mozos de su finca los organizó y equipó estableciéndose en Bobastro. Restauró las ruinas romanas que existían y que resultaban inexpugnables. Alcanza su primera victoria frente al gobernador de Raya en la peña que hoy llamamos de los Enamorados y a ésta siguen otras hasta que los magnates cordobeses le tratan de igual a igual.
          Durante su estancia en Córdoba su cultura se perfecciona y su carácter se dulcifica siendo más afable y cortés. Las arengas que dirige a sus compatriotas cristianos son vibrantes y se gana el afecto de los que le siguen y obedecen ciegamente. Siempre a la cabeza y en el sitio de mayor peligro se batía con la espada o la lanza hasta el final del combate y todos le siguen a la primera señal.
          Llega a ser durante muchos años el verdadero rey de Andalucía y su nombre símbolo de libertad para los pueblos. Poseyó dilatadas comarcas en Málaga, Jaén, Córdoba, Granada, Estepa, Osuna, Écija… Sus tropas, más de una vez llegaron a las mismas puertas de Córdoba. Se alió con los califas de Oriente, con los reyes asturianos, con los Benicasi de Aragón y recibió embajadas en su sobrio alcázar de Bobastro. Allí los embajadores del califa de Occidente le reconocen como señor feudal de  todos los territorios que dominaba.
          Murió en su fortaleza de Bobastro, capital de sus estados, temido de sus enemigos y amado por millares de andaluces. Su cuerpo fue sepultado junto a la iglesia rupestre. Con su muerte acaecida en el 917, perece el partido nacionalista que fundara pues sus hijos no fueron capaces de continuar su obra, ni aún conservar el reino que les legó. El califato vióse libre de su más poderoso enemigo.
          Las ruinas del alcázar y otras construcciones defensivas se encuentran en las cumbres de "Las Mesas de Villaverde" formadas por los cerros de La Encantada, Tintilla y Castillón, éste último partido en dos por la acción del río Guadalhorce.